Hoy fue un día de esos que se le pasan a uno casi sin darle la oportunidad de darse cuenta; que pasan desapercibidos, ocultos o no dentro de la bruma de los pensamientos; tal cual que algo similar a la felicidad o a la ausencia absoluta de ella. Quien sabe a que se parecen estos días; pero siempre me pasa que se me pasan sin darme cuenta.
No es algo que corresponda con la idea de aburrimiento a la que me he estado pegando por la necesidad de la propia melancolía que me aborda y se hace una con mi ausencia de sentir.
Se me ha olvidado hacer una cosa importante, y mañana tendré que hacer otro tanto, sin embargo no creo que pase a mayores; como de costumbre, tanto que hacer y tan pocas ganas de hacerlo. Pero mañana será otro día.
Se me ha olvidado hacer una cosa importante, y mañana tendré que hacer otro tanto, sin embargo no creo que pase a mayores; como de costumbre, tanto que hacer y tan pocas ganas de hacerlo. Pero mañana será otro día.
2 comentarios:
Suele suceder...solo hay que esperar que haya un nuevo día.
Clau: Precisamente, precisamente.
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